El proyecto se erige en la urbe de Cuenca, dentro de la parroquia de Chordeleg. Con una parcela de forma rectangular que abarca 324,20m2 y se ve condicionada por la contigüidad lateral, se concibe una propuesta con perspectivas orientadas hacia el espacio adyacente. En la planta baja, se implementa una pasarela perimetral de 3 metros, enmarcada por vegetación, que, aprovechando el espacio circundante, engendra un patio lateral que sirve como área delimitada y de esparcimiento para la zona social, a la vez que crea una presencia monumental con su doble altura. El diseño delinea una disposición espacial que optimiza la entrada de luz natural y las vistas panorámicas, forjando un entorno placentero y sereno.

Este proyecto no solo es un reflejo del talento y la visión del arquitecto, sino también un testimonio del compromiso con la excelencia en el diseño y la calidad de vida de quienes lo habitarán. naturales puede crear un espacio residencial que no solo cumple con las necesidades funcionales de sus habitantes, sino que también ofrece una experiencia estética y sensorial única.